En su búsqueda para convertirse en una famosa violinista, Ji-Hae cayó en una depresión severa. Sólo la música ha sido capaz de levantarla de nuevo - mostrándole que su objetivo no tiene que ser para jugar salas nobles, pero en lugar de llevar la maravilla del instrumento a la mayor cantidad de gente posible.
Ji Hae-Park se extiende la alegría de la música clásica a los que de otro modo no oírlo -. Y en el proceso demuestra que se puede bailar en el violín
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